Para celebrarlo, que mejor que una comiliona
en unos de los mejores restaurantes de Irlanda: Ballymaloe.
No te tratan "de usted" de milagro, pero se come exquisitamente.
Era el ambiente perfecto para que me diera el anillo,
y el tio se espero hasta llegar a casa para darme el regalo.
No me lo esperaba, pero paso.
No es el de pedida, sino el de "piensatelo".
Yo ya se la respuesta.
A el le cayo una chaqueta de motero de chuuupate la punta.
Que rico que estas!
TKRÖ
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